Entrevista con Eduard Fernández, protagonista de Todas las mujeres

El polifacético actor Eduard Fernández (Barcelona, 1964) se dio a conocer en Lobos de Washington, una película de Mariano Barroso, director con quien acaba de repetir rodaje en Todas las mujeres. El catalán es un auténtico diamante patrio que ha compartido pantalla con otros grandes intérpretes sin quedar nunca en un segundo plano. Eduard se muestra campechano y natural ante las preguntas, una explosión de espontaneidad y convicción que convierte en algo muy sencillo creer todo lo que diga.

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Mariano Barroso dice que pretende volver con esta película a La esencia del cine, guión y actores  ¿Crees, cómo actor, que estos elementos son los más importantes? ¿Son la base de una buena película?

Desde luego es una de las maneras posibles de hacer cine, volver a los orígenes, la esencia. Los directores, el guión y los actores. Realmente aquí solo se dan esos tres elementos, y si alguno de ellos falla no habría película. No hay nada externo que distraiga o entretenga al público; Ni efectos, ni persecuciones, ni planos para entretener aparte de esta esencia.

Tú interpretas a Nacho, un hombre sin moral. Al final de la película no sabemos si estamos ante un Don Juan moderno o una especie de Maquiavelo. ¿Tú cómo definirías el personaje?¿Un hombre sin escrúpulos o un hombre que se ha hecho así a base de fracasos sentimentales?

Está muy bien eso que dices. Es alguien que no se atreve a coger las riendas de sus vidas ni a comprometerse. Ha mentido tanto que ha entrado dentro de su propia mentira. Quiere que le saquen las castañas del fuego, está muy poco hecho como persona. También emocionalmente quiere que las mujeres, a las que manipula, le ayuden y le saquen las cosas. No se enfrenta a nada, no quiere que le lleguen al fondo. No se compromete con nada ni nadie. Al final ellas le van dejando y al quedarse solo deberá tomar las riendas. Siempre se intenta excusar en motivos exteriores para justificar que no le vayan bien las cosas.

¿Es ese mentir por inercia inherente a las relaciones ahora mismo? España es el país europeo donde mayor tasa de incremento de divorcios hay.

¿Sí? Creo que habrán bajado por el tema económico últimamente (Risas) No sé, no lo había pensado, es una actitud muy latina. La de Nacho es la actitud de Don Juan, y es verdad que las mujeres se han enamorado, le han querido, y que el es fiel de alguna manera, así que algo tiene el personaje, es “querible”, tiene muchas capas y solo le queda atreverse  a vivir.

¿Qué destacarías del reparto femenino? Debe ser curioso trabajar con esa mezcla de veteranía y juventud talentosa.

Las relaciones que uno mantiene con ella son un poco como sus personajes ¿No? Está la mujer que te deja, Lucía Quintana, y que él está encantado de que se vaya pero con la que quiere acabar bien. Es lógico que por Michelle Jenner se vuelva loco y le vuelva al revés la cabeza aunque al final no haga nada. María Morales le pone los puntos sobre las íes, en un escenón impresionante. Petra Martínez para entender como este hombre es así, la madre, un papel fantástico. Marta Larralde, su cuñada, una mujer de carácter fuerte y Nathalie Poza, con la que nos hartamos de reír en el rodaje.

La película es fuel a la serie original, aunque originalmente fuese concebida como un largo ¿Qué diferencias hay entre la serie y el largometraje?

El cine permite una mayor continuidad, tanto para la historia como para el personaje. Al final, en pantalla grande, la evolución del personaje se acelera y es tal que cae en una especie de vorágine, un ritmo trepidante, uno sigue más esta transformación que es más continuada y permite atraer más la atención del espectador.

Todos los proyectos en común que has hecho con Mariano Barroso tienen algún tipo de reconocimiento en forma de premio. Desde Lobos de Washington pasando por Hormigas en la boca, al final en un festival o una entrega de galardones siempre sales bien parado. ¿Qué esperas de Todas las mujeres?

¿Qué que espero? Bueno, la verdad es que es tentar un poco a la suerte, pero creo que la película es lo suficientemente buena y tiene el suficiente impacto para conseguir algo grande. Personalmente, me encantaría volver a los Goya, que llevo mucho tiempo sin figurar allí.

Para terminar, recomiéndame una película maldita.

¿Cuenta Shine como película maldita? ¿No? Entonces te voy a recomendar otra de Fassbender que es Hunger.

eduard fernandez

*Imágenes cedidas:
La entrevista se realizó en la galería Ministerio de Asuntos Importantes

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